El titular del Mineduc indicó que gracias a las manifestaciones "se ha instalado en Chile el tema de la educación como prioridad" y que para lograr cambios se "requiere de un gran acuerdo nacional".
El ministro de Educación, Joaquín Lavín, dijo que "francamente no" ha pensado en renunciar tras las críticas recibidas por el sector político en cuanto a su gestión y a la petición del movimiento estudiantil de que deje el cargo. "Cuando me nombraron ministro yo sabía que estas cosas podían pasar", sostuvo.
Según Lavín, quienes demandan una reforma "no pueden pretender que un gobierno y un ministro cambie los problemas de la educación que vienen hace décadas", sentenció en conversación con radio 95 Tres. "El problema de la calidad de la educación es la razón número uno por la cual yo estoy aquí trabajando como ministro", enfatizó.
Asimismo, el secretario de Estado señaló que no toma las manifestaciones como algo personal. "Yo observo las marchas desde acá arriba, desde mi oficina en el séptimo piso del Ministerio de Educación. Escucho lo que la gente grita en la calle, pero no lo puedo tomar como algo personal", añadió el titular del Mineduc, quien expresó que "yo también podría estar marchando", ya que indicó que gracias a las manifestaciones "se ha instalado en Chile el tema de la educación como prioridad".
"Este es el minuto de la educación, que estamos llegando a un momento de la historia de Chile en que la educación pasa a ser prioridad número uno. Entonces tengo clarísimo que es el minuto que nosotros tenemos que aprovechar", agregó.
Por eso, dijo, se "requiere de un gran acuerdo nacional" para "hacer un cambio que puede ser histórico en Chile".
0 comentarios:
Publicar un comentario